DONDE ESTA?

CRUCERO A BAHIA SAN BLAS



Por  Martín Pachiani


El pequeño visitante

De acuerdo a lo planificado zarpamos de San Isidro el 3 de Febrero bajo un agobiante sol de verano que provocaba en la tripula un constante demanda de liquido. De seguir consumiendo agua a ese ritmo no nos alcanzaría para llegar a Mar del Plata. Manteníamos el spinnaker inflado haciendo las guardias entretenidas mientras el Hannah Boden navegaba a buen ritmo dejando atrás Buenos Aires y Quilmes, poco antes de llegar a Atalaya nos cruzamos con un velero que navegaba de vuelta encontrada, sus líneas esbeltas eran las del Fjord VI.
Inmediatamente tome la radio e hice enlace con su Capitán, Carlos Saguier Fonrouge, quien fuera mi profe en la Liga Naval Argentina. A la tarde arriamos el globo y organice los horarios de guardia para la noche, por un lado Tony con Pedro y por el otro Damián con Fabio yo decidí no cumplir horarios permaneciendo atento y descansando de a ratos. La noche llego iluminada por una luna casi llena que nos acompaño hasta las dos de la mañana poco antes de llegar a Punta Piedras. Allí encontramos aguas muy revueltas, las olas parecían confundidas y llegaban desde todas partes haciendo difícil el gobierno del barco. Decidí arriar la vela mayor ya que el viento en popa nos llevaba directo al Cabo San Antonio. A la mañana navegábamos la Bahía de Samborombón rodeados por el mar verde esmeralda, nos sorprendió un pequeño pájaro que aparentemente perdido busco refugio en el barco, pero lo mas notable fue que se poso en el brazo de Damián y avanzo sobre el antebrazo hasta quedar en su hombro. A pocas millas de San Clemente obtuvimos señal de teléfono y aprovechamos para ver la situación sinóptica. El pronostico que nos paso la costera de General Lavalle corroboraba lo que habíamos visto, esa noche pasaría un frente y que mejor que pasarla en puerto. Al mediodía ingresamos en el arroyo San Clemente con bajamar debiendo izar el timón y la orza para franquear la barra y luego tomamos  amarra en el muelle de madera de Tapera de López.


 


Rumbo a Mar del Plata

Zarpamos con la pleamar del día siguiente, virando Punta Rasa con un mar arbolado que quedaba de remanente del frente frío de la noche anterior, el borde en ceñida nos llevaba paralelos a la costa pasando muy cerca de los balnearios de San Clemente, Santa Teresita, San Bernardo y Mar de Ajo desde donde me llegaron algunos llamados telefónicos de amigos y familiares que fueron espectadores de nuestro paso casi encima de la rompiente. Pasamos Punta Médanos por la canaleta y festejamos con un opíparo almuerzo de ravioles con salsa. El viento se franqueo así que izamos el globo para avanzar siguiendo la zona de Pinamar donde se acercaron kayaks, motos de agua y un intrépido Kitero que hacia danzar su cometa a pocos metros del palo del Hannah. Mientras el sol se apagaba en el horizonte cambiando los tonos del paisaje el Faro Querandí lucia esbelto en lo alto de la costa medanosa. La noche clara era una verdadera delicia donde divisábamos las luces lejanas que parecían destellar al ocultarse tras las suaves ondas del mar, mientras la luna llena dejaba un sendero plateado que iluminaba las velas del barco. A medianoche estábamos a solo tres millas del Cabo Corrientes siguiendo la luz del faro de Punta Mogotes, buscando las farolas del puerto. Pasamos un buque Potero muy iluminado y una vez al abrigo del puerto tomamos amarra en el muelle exterior del CN Mar del Plata. Como de costumbre recalar en Mar del Plata es motivo para visitar amigos y disfrutar la calidez del lugar que en esta oportunidad lucia el colorido de la Semana Internacional del Yachting con el aglomeramiento de cientos de barquitos de vela ligera y el bullicio de los entusiastas Optimistas.


 




Proa al sur

Por iniciativa de Alfredo quien es oriundo de Chubut, planificamos el crucero a San Blas como para buscar un destino diferente con aire patagónico. Además en aquel puerto tiene sus barcos de pesca un primo suyo que nos había facilitado información sobre el lugar.
Pasado el temporal que se abatió sobre Mar del Plata esos días zarpamos el 9 de Febrero con un importante mar de fondo trepando olas que alcanzaban los 4 metros de altura. De la tripulación original quedaban Tony y Pedro mientras que embarcaron Víctor, procedente de Rosario, Nelson y Alfredo de manera que dividí la tripulación en dos guardias compartiendo mi turno con los últimos. Luego de pasar las restingas de Punta Mogotes cambiamos nuestro rumbo al sudoeste y la navegación se hizo mas confortable permitiendo una lenta recuperación a quienes estaban un poco mareados, gradualmente nos apartábamos de la costa y los edificios de Necochea serian los últimos que veríamos antes de quedar teniendo como único horizonte el del mar, ya que la ruta directa nos alejaba a mas de 80 millas de la costa. Nuestra única posibilidad de comunicación en los siguientes dos días seria por VHF utilizando algún buque de puente. El Hannah cortaba el mar transparente a más de 6 nudos y las millas se acumulaban con velocidad, utilizamos diferentes configuraciones en el velamen para aprovechar el viento franco en una navegación muy placentera. A medida que avanzábamos hacia el oeste decrecía la declinación magnética llegando a tener valor cero a la altura de El Rincón. En la madrugada del día 10 aparecieron los delfines y nos acompañaron un buen rato nadando junto al barco en el mar azul intenso. Al mediodía Alfredo tomo la meridiana de sol con bastante precisión y como era tiempo de almorzar puse el timón automático para compartir despreocupadamente este momento, a esa practica la mantuvimos como costumbre durante todo el viaje  en las dos comidas fuertes del día. El viento fue aumentando en el transcurso de la tarde llevándonos a orejas de burro. Cuando hice el despacho en Mar del Plata la Prefectura me solicito que transmitiese mi posición dos veces por día, pero hacia más de 24 horas desde mi última comunicación así que tome el VHF y radie a cualquier embarcación a la escucha. Luego de varios intentos me respondió el buque Talabey y me hizo de puente con el Guardacostas Mantilla que navegaba por la zona a quien transmití nuestros datos de navegación. Al pasar las coordenadas caí en la cuenta que habíamos superado el paralelo 40 sur, la latitud de los Roaring Forties según los antiguos navegantes ingleses, la latitud que eligió Vito Dumas para su circunnavegación en solitario a bordo del Legh II. Estábamos a la altura del Río Colorado donde para la mayoría empieza la Patagonia. Para entonces el viento superaba los 20 nudos y para continuar relajados el resto de la noche arriamos la mayor, aferrándola sobre la botavara, navegando en popa con genoa algo enrollada. El barómetro bajaba en forma inquietante y el viento rotaba al noroeste obligándonos a cazar la escota de foque para orzar al máximo solo con la vela de proa. Disminuía la profundidad a medida que nos acercamos a la costa que por ser muy baja no lográbamos divisar, las rachas alcanzaban los 30 nudos y llegaban justo desde nuestro destino haciendo difíciles las últimas millas de aproximación. Alcanzamos la zona de bancos con aguas turbulentas y rompientes bien visibles en las zonas de menor profundidad. Para completar el escenario la bahía vaciaba sus aguas al mar con una fuerte corriente que teníamos en contra, bordejeábamos infructuosamente cayendo frente a los mismos bancos con cada virada. Establecimos la mayor con dos rizos y con el transcurso de las horas aflojo el reflujo permitiéndonos optimizar cada pierna para ganar barlovento. Superados los bajofondos contemplamos el paisaje con islas bajas, arbustos y playas de canto rodado desde donde levantaban vuelo bandadas de aves. Sobre la margen de babor esta emplazado el pueblo de San Blas, sitio visitado principalmente por pescadores que se acercan en busca de su variada fauna ictícola. Nos acercamos a la zona de fondeo y dejamos caer el ancla en 15 metros de profundidad, frente al edificio de la Prefectura.  Inflamos el bote auxiliar y nos preparamos para desembarcar con los papeles para hacer el trámite de rutina.

 





Bahía San Blas

Bahía San Blas esta dentro del Municipio de Patagones y dista a 90 kilómetros por tierra del pueblo Maragato, en 1832 paso por allí la nave Beagle de la expedición científica del Capitán Fitz Roy donde viajaba el naturalista Charles Darwin, ellos relevaron el lugar dejando cartografía que se utilizo hasta fines del siglo XIX. El pueblo esta sobre la Isla Jabalí que esta rodeada por la ría del mismo nombre y se une con el continente por un antiguo puente carretero. A principios del siglo pasado comenzó a trabajar la compañía salinera Anglo-Argentina que traía sal en estado líquido por cañerías desde las salinas de Piedra, cercana a la localidad de Cardenal Cagliero. La sal se depositaba en unos piletones ubicados cerca de la actual Capilla San Blas, donde se secaba al sol para luego ser embolsada y enviada a Buenos Aires para su exportación. El funcionamiento de la salinera trajo aparejado el establecimiento de la oficina de Correos y Telégrafo y la primera escuela primaria de la zona. También se transporto canto rodado para la construcción de la Base Naval de Puerto Belgrano. En 1914 entro en funcionamiento el Faro Segunda Barranca ubicado 30 km al sur de San Blas. El apellido Wassermann esta fuertemente ligado a la historia del lugar, ya que fueron los propietarios de estas tierras y se encargaron de darle la fisonomía que tiene actualmente mediante la forestación y varias obras edilicias. En la década del 50 se instalo la empresa Titanit S.A. con el propósito de extraer magnetita titanífera que el mar depositaba en las playas, pero el recurso no resulto sustentable.  Actualmente Bahía San Blas esta declarada Reserva de Usos Múltiples y la principal actividad es el turismo, principalmente atraído por la pesca deportiva con caña que se puede realizar desde la costa o embarcado. Y precisamente esa es la especialidad de Carloto, el primo de Alfredo, quien en cierto modo fue nuestro anfitrión y tuvo la amabilidad de prestarnos un bote mas grande que mi pequeño auxiliar con el que desembarcábamos cómodamente a veces con fuerte corriente y marejada. Lamentablemente nuestra estadía fue corta, y el clima fue un poco hostil con fuertes vientos y lluvia, condiciones que  me mantenían atento a la situación del barco que para entonces se hallaba bien amarrado a un muerto que nos prestaron. A pesar de ello disfrutamos del lugar y la última noche nos dimos un buen banquete de cordero patagónico hecho al asador en el restaurante de Norma y Juan. Al día siguiente con un pronostico de vientos suaves del primer cuadrante dejamos San Blas navegando velozmente corriente a favor con un cielo azul que delineaba el árido paisaje, emprendíamos el largo regreso, pero esa es otra historia.



Martín Pachiani
febrero de 2012

REFLOTAMIENTO DEL GALILEO

Aporte de Gustavo Agra

Recalada:
Esto me fue enviado por mi maestro en las artes de la náutica, uno de los mas grandes navegantes del Río de la Plata. De perfil bajo y largas navegaciones por la costa argentina, pocos saben de eso porque a él no le interesa que se sepa, sólo le interesa navegar. Es el dueño del Taitu, un 40/12 verde medio fulería pero bien adaptado a su estilo de navegar que se ve en las fotos y de un pequeño dobleproa que, según parece, fue el primer diseño del viejo Frers. El es el que se ve remando con gorrita, se llama Gustavo Nordenstahl (y cuando te digo que sabe es porque sabe más que todos los que conozco) .
El barco varado es bastante famoso y el laburo que se mandaron fue perfecto. Esto le vendría bien verlo a “la gilada” que cuando baja un poco se fondea a la altura de la 23.
Gus

Hola navegantes,
Les paso un compilado de nuestra última aventura, ayudando a una pareja de amigos que con su barco se quedaron varados arriba de una isla frente a San Isidro, luego de quedarse sin máquina durante un temporal del Sur, con 3 mts. de pleamar en el momento del incidente.
De ofertas ridículas de supuestos expertos del Tigre, hasta opiniones de cortar el quillote o sacar el palo, este muchacho se las ingenió para sacar al barco de arriba de la isla. Es para guardarlo para uso futuro de encontrarnos en similar condición.
Yo siempre llevo debajo de una cucheta un aparejo de cuadernales y cabo bien grueso para poder arrastrar mi barco en caso de quedarme pegado. Viendo esto, voy a agregar una pala y un machete ...
Abrazo,
Gustavo Nordenstahl
(No puedo con mi deformación profesional de salvamentista marino)

A Carlos y Vicky:
Aqui va nuestro aporte a la documentación de tu impecable maniobra de reflotamiento.
Gran abrazo,
Gus












LA METODOLOGIA
El Capitán excavó una zanja de unos 50 cm de profundidad, y colgó una bolsa con 400 kgs de barro del palo, para ganar unos 70 a 80 cm de reducción del calado.
En la orilla opuesta del Zanjón posicionó dos anclas bien fondeadas entre los juncos, y con el malacate estaba preparado para que –viniendo unos 2 mts. de marea – el barco pudiese ser deslizado por la zanja hasta el medio del Zanjón.
Esto funcionó a la perfección, con 2,20 mts en Braga el 27 de febrero de 2012 a las 09:30 hs.


















EPILOGO

Luego de la adrenalina del primer llamado de Vicky el 22 de febrero, y luego de la frustración de no poder llegar con ninguno de los dos gomones, y luego de sacar un certificado médico para que el CNSE nos dejara usar un bote de remo, Vivi y Gus nos fuimos remando para inspeccionar el lugar con 0,20 sobre cero en Braga, y finalmente pudimos prestar nuestra parte de asistencia el día del reflotamiento (27 febrero)!
GRACIAS POR PERMITIRNOS PARTICIPAR!!
FELICITACIONES POR UNA IMPECABLE PLANIFICACION DEL REFLOTAMIENTO, casi con tus propias manos!

Y TUS TUERCAS, COMO ESTAN??? 2a. parte


Por Guillermo "el profe" Talmon

Publicado en el Foro de

El Galeón Pirata el 22 de marzo de 2012

http://www.elgaleonpirata.net/viewtopic.php?f=7&t=8385&p=107177#p107177


Bueno... como lo prometido es deuda, vamos con las fotos de hoy que muestran como va quedando, o mejor dicho como ha quedado.

Respecto a lo que preguntaba el caro Padrino, le cuento que sacamos la semana pasada 2 de los 9 espárragos para verificar el estado de conservación y efectivamente estaban inmaculados. Sin dudas el material de los espárragos deben ser de calidad superior a 1045/1070.

Por lo que pudimos averiguar (averiguaré en guaraní!) las tuercas y arandelas eran las que colocaron en el astillero allá por mediados de los 80´s. El estado calamitoso en que estaban se debe a la desidia de no haber mantenido las mismas.

El barco es un Plena 23.

La pintura es Antióxido Epóxi industrial. 3 fueron las manos y ya está listo para salir a las pistas!

Que lo disfruten

GT






VAN 30

EL RINCON DE HUGO W.
del inagotable archivo de Hugo W. Barzola




VAN 30



Y TUS TUERCAS, COMO ESTAN???



Por Guillermo "el profe" Talmon

Publicado en el foro de El Galeón Pirata

el 16 de marzo de 2012

http://www.elgaleonpirata.net/viewtopic.php?f=7&t=8385





Hola a todos!


Muchos hemos visto tuercas de quillotes en este estado o las tenemos así o parecidas. La cuestión es que el navegar con las tuerquitas en estas condiciones es altamente peligroso!

Hoy junto con mi hermano, nos ha tocado en suerte hacer el trabajo de reemplazo en el barco de un ex alumno y recordé llevar la cámara para que quede el registro fotográfico y poder compartirlo con ustedes.

En estas 2 primeras fotos se pueden apreciar el estado en que estaban las tuercas y espárragos.






Ustedes se estarán preguntando "cómo hacer" para sacarlas?, si no hay forma de poner una lleve, ni un tubo ni nada!

La forma de quitarlas es picar todo lo que se pueda, con martillo y cortafrío, haciendo que se desprenda todo el óxido. Una vez hecho esto se procede a hacer un corte vertical (con amoladora y disco de corte) sobre el cuerpo de la tuerca pero sin dañar los filetes del espárrago (o mejor dicho, dañando lo menos posible!). Esto, obviamente que es el punto mas conflictivo del trabajo y el que requiere mayor precisión.

Hecho esto (el corte), se debe desprender la tuerca (que quedó debilitada por el corte) por medio del cortafrío y maza.

La tuerca queda así.




Y el espárrago, después de la limpieza con el cepillo de alambre queda en este estado.




Para el caso de este barco en particular, que tiene 9 espárragos y tuercas, el trabajo se debe hacer escalonado. Es decir, se deben ir quitando en forma intercalada (uno si, otro no) y pasar a colocar las arandelas y tuercas de inoxidable nuevas. Obviamente que se sella (como podrán apreciar en la foro) y se aprietan con tubo de 24 y la palanca de fuerza.




El trabajo de reemplazo queda así.




Ahora (después del secado hasta la semana que viene) solo queda aspirar, pasarle desoxidante y fosfatizante a los espárragos para que no generen mas óxido y pintar con poliuretano blanco (que se pueda comer un huevo frito ahí!).

La semana que viene les subo mas de cómo van quedando.

Nota:

Este trabajo solo se puede realizar con el barco en tierra y estando apoyado.

El hacerlo en forma escalonada (quitar las tuercas) se debe a que si sacamos todo corremos el riesgo que el barco se caiga ante algún movimiento.

Que lo disfruten!

GT